El surfista local de Jeffreys Bay, Joshe Faulkner, y Tia Blanco han sido galardonados con una invitación al J-Bay Open que comenzará el próximo 12 de julio.

No es una noticia que vaya a extrañar a nadie: The Ultimate Surfer se despide después de solo una temporada, debido a los índices de audiencia muy bajos.

Este reality luchó durante sus ocho episodios por encontrar su lugar entre la ingente cantidad de programas de este tipo que se ofertan en la televisión, sin éxito alguno. Cuando el programa se estrenó en agosto de 2021, menos de 1,5 millones de espectadores lo sintonizaron.

Según varios medios, la razón de la cancelación es meramente una cuestión de audiencia y no obedece a ninguna decisión del WSL, que estaba dispuesta a continuar produciéndola y a premiar a los ganadores con la participación en varios eventos del Championship Tour.

Hicieron, por tanto, oídos sordos a una gran cantidad de surfistas profesionales que no estaban conformes con que se premiase por realizar un reality cuando los demás debían competir (y ganar) en varias ligas durante la tempordada para llegar hasta el mismo lugar.

La primera temporada fue protagonizada por Anastasia Ashley, Tia Blanco, Kai Barger, Mason Barnes, Zeke Lau, Austin Clouse, Brianna Cope, Luke Davis, Kayla Durden, Juli Hernandez, Koa Smith, Alejandro Moreda, Malia Ward y Bruna Zaun.

La primera temporada acabó siendo ganada por el hawaiano Zeke Lau, que finalmente se clasificó para el CT y no tuvo que hacer uso de su premio, mientras que en categoría femenina fue Tia Blanco, que se ganó el derecho a entrar en tres etapas del CT como invitada.

El nombre de Mason Barnes salió a la palestra hace un año, con la llegada de Epsilon, la marejada mas grande en años en llegar a Nazaré, y posteriormente con su participación en el reality 'The Ultimate Surfer'.

Wilmington, en Carolina del Norte, no es prcisamente el primer lugar en el que uno suponga que puede salir un surfista de olas grandes, pero claro, su familia tenía otra casa en la costa norte de Oahu.

Ahora, en su nuevo vídeo, Barnes nos muestra de qué es capaz en olas como Pipeline, Puerto Escondido, o Nazaré.

 El surfista brasileño ha afirmado en un muy interesante artículo en el New York Times (os lo dejo abajo), no estar conforme con la celebración del los Rip Curl Finals.

"No me gusta porque no creo que sea justo", dijo Medina, dos veces campeón mundial que ha acumulado una ventaja de puntos tan grande esta temporada que probablemente ya habría sido nombrado campeón mundial. bajo el formato anterior. En cambio, debe ganar dos de las tres eliminatorias para reclamarlo.

"Pasas tu vida, un año, y ahora el último evento en septiembre, ¿vas a decidir todo el año?" se preguntó. “No sé de negocios, no sé cómo funcionan”, dijo Medina. "Intentaron hacer algo diferente".

Lo que el WSL quiere se centra en la intriga. Solo en raras ocasiones, incluida la victoria de Italo Ferreira sobre Medina en el Pipe Masters 2019, el título se ha decidido en una sola prueba.

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SAN CLEMENTE, California - El ambiente en el muelle era predeciblemente suave, incluso con 10 de los mejores surfistas del mundo reunidos.

Las nubes bajas de la mañana aún no se habían disipado. Las parejas disfrutaban del desayuno en la terraza del restaurante Fisherman. Los pescadores colgaban sus sedales bajo el Océano Pacífico. Las gaviotas se quedaron en los fregaderos de acero inoxidable donde se destripa y se limpia la captura.

Cerca del final del muelle de San Clemente, surfistas como Carissa Moore y Gabriel Medina se arremolinaban en chanclas y gorras con los logotipos de los patrocinadores. Fueron convocados para ayudar a promover una nueva era en el surf profesional.

El surf trabaja duro para proyectar una actitud despreocupada. Pero hay una agitación persistente en torno al negocio del surf profesional, un trasfondo de décadas en la cultura. Es la creencia infatigable de que hay más aficionados a los que enganchar y más dinero que ganar.

Es por eso que la World Surf League está operando este año con un formato de urgencia. Bajo un nuevo liderazgo, espera aprovechar el impulso del debut olímpico del surf en Tokio mientras revisa su calendario y, más notablemente, la forma en que corona a los campeones.

La temporada del campeonato solía terminar en diciembre en la costa norte de Oahu, generalmente con olas dramáticas en forma de tubo, pero a menudo sin suspenso. Los surfistas, que acumulaban puntos en eventos de todo el mundo durante todo el año, a veces llegaban a Hawái habiendo conseguido ya un título mundial.

Ahora, la temporada terminará en septiembre, esta vez en Lower Trestles, en la costa en el extremo sur de San Clemente, con un surf-off de un día entre los cinco mejores hombres y las cinco mejores mujeres.

La idea es crear una atmósfera de playoffs, un evento singular para estampar en la mente de los posibles aficionados y los medios de comunicación que lo siguen.

El día exacto del evento de este año es incierto (la imprevisibilidad de las olas es uno de los encantos y quebraderos de cabeza del surf competitivo) pero parece más probable que suceda el lunes o martes.

Los surfistas surfearán en un solo día. Los surfistas mejor clasificados, Moore y Medina, tienen descanso hasta llegar a una final al mejor de tres eliminatorias. La ruta para otros depende de la clasificación de la temporada. Los surfistas cuarto y quinto clasificados, por ejemplo, tendrían que ganar tres eliminatorias  contra tres competidores para llegar a la final.

El formato de un día no es universalmente querido. Incluso los mejores surfistas se preguntan qué está pasando.

"No me gusta porque no creo que sea justo", dijo Medina, dos veces campeón mundial que ha acumulado una ventaja de puntos tan grande esta temporada que probablemente ya habría sido nombrado campeón mundial. bajo el formato anterior. En cambio, debe ganar dos de las tres eliminatorias para reclamarlo.

"Pasas tu vida, un año, y ahora el último evento en septiembre, ¿vas a decidir todo el año?" se preguntó mientras se encogía de hombres. “No sé de negocios, no sé cómo funcionan”, dijo Medina. "Intentaron hacer algo diferente".

Lo que el WSL quiere se centra en la intriga. Solo en raras ocasiones, incluida la victoria de Italo Ferreira sobre Medina en el Pipe Masters 2019, el título se ha decidido en una sola prueba.

La australiana Stephanie Gilmore, siete veces campeona mundial y cuarta cabeza de serie en la final, también tenía reservas sobre la nueva configuración. Pero recordó haber logrado la mayoría de sus títulos mientras estaba de pie en la playa, cuando los aspirantes perdían en las eliminatorias.

El nuevo formato no solo le da la oportunidad de conseguir un octavo título, sino que pone a los surfistas en eliminatorias cara a cara con todo momento.

"Como atleta, realmente sueñas con poder ganar en ese tipo de situación", dijo Gilmore.

No es una idea nueva. Los organizadores de otros deportes individuales, como el PGA Tour y NASCAR, han diseñado eventos al estilo de los playoffs para preparar el final de la temporada.

Pero el surf es diferente. ¿O es eso? Durante mucho tiempo ha estado inundado de preguntas cósmicas que enfrentan muchas actividades al aire libre en estos días: ¿es un estilo de vida o un deporte global? ¿Pueden (o deberían) ser ambos?

A pesar de que la cultura del surf (música, moda, lengua vernácula) ha penetrado en tantas facetas de la sociedad, en todo el mundo, el deporte trabaja para marcarse a sí mismo como antisistema. Al igual que con surfear una ola, no es bueno parecer que se está esforzando demasiado.

El éxito del surf profesional ha ido disminuyendo y fluyendo durante décadas. El inicio de 1976 de International Professional Surfers dio estructura a una colección de campeonatos. La Asociación de Profesionales del Surf (ASP), fundada en 1983, consolidó una gira mundial detrás de marcas centradas en el surf como Rip Curl, Billabong y Quicksilver.

Los patrocinadores y algunas marcas de surf se desvanecieron, algunas en bancarrota, dejando a los profesionales del surf en constante búsqueda de estabilidad.

Hace aproximadamente una década, un grupo de inversores, dirigido por un par de ejecutivos de la industria del surf, acudió al rescate y luego recibió una infusión estabilizadora del multimillonario Dirk Ziff.

Las cosas se han movido rápidamente en los últimos seis años. La ASP  se reconstruyó y cambió su nombre a WSL en 2015. La tecnología Wave-Pool agregó intriga y visiones de la esquiva ola perfecta. En 2018, el WSL  anunció el mismo premio en metálico para hombres y mujeres. Los dos campeones defensores de la WSL, Moore y Ferreira, ganaron medallas de oro en la primera competición olímpica de surf este verano.

Detrás del escinario, el WSL ha pasado de ser un principalmente un organizador de campeonatos. En 2019, contrató a Erik Logan, presidente de Oprah Winfrey Network y vicepresidente ejecutivo de Harpo Studios, para ser presidente de contenido, medios y estudios.

Ayudó a crear el programa de telerrealidad de ABC "The Ultimate Surfer" y la serie documental de HBO "24/7: Kelly Slater". Este WSL será parte de una próxima serie de Apple TV de seis partes, inspirada en la "Fórmula 1: Conducir para sobrevivir" de Netflix.

En 2020, Logan fue ascendido a director ejecutivo, poco antes de que la pandemia cerrara la temporada. Eso le dio a Logan y a la liga la oportunidad de reinventar la gira. Cambió las pruebas de Hawai desde el final de la temporada al principio. Unió los destinos para hombres y mujeres, que a menudo tenían eventos separados.

E ideó un evento de campeonato de final de temporada.

"La oportunidad de ganarlo en el agua, en la arena, es una oportunidad realmente única en el surf que realmente no ha sucedido", dijo Logan. "Fuimos bendecidos en 2019 al ver eso con Italo y Gabe en Pipeline, y la intensidad de eso realmente nos indicó el camino a seguir".

El impacto tangible de todos los cambios, incluido cualquier rebote de los Juegos Olímpicos, es difícil de discernir. El WSL retransmite los eventos de su gira en su sitio web y en YouTube, y dijo que el tamaño promedio de audiencia es un 7 por ciento más alto en 2021 que en 2019, con un aumento del 20 por ciento en el total de horas consumidas.

En San Clemente, Logan, de 50 años, usa gafas de sol, una barba recortada, jeans descoloridos y Vans limpias. Encarna el equilibrio de la ambiciosa búsqueda de construir un deporte global con una sensación de relajación relajada, no muy diferente del deporte que él gobierna.

Después, cuando los surfistas se fueron y las nubes se rompieron, se quedó solo en el muelle. Hacia el sur, más allá de una escuela de surfistas en T Street, un clásico surf break de San Clemente, estaba la línea costera de Trestles Beach.

La idea es mover las finales cada año, de la misma forma en que el Super Bowl o la mayoría de los grandes golfistas rotan ubicaciones. Septiembre, elWSL. dicho, es un buen mes para las olas en una variedad de lugares de surf en todo el mundo.

Pero Lower Trestles, una parada popular de la gira durante años, tenía sentido para el evento inaugural. Está en el sur de California, el hogar económico del surf, cerca de patrocinadores y empresas de medios, surfistas y sus aficionados. Y tiene espacio para miles de personas, con buenas olas relativamente cerca de la playa.

Eso debería proporcionar exactamente lo que el WSL desea: imágenes de los mejores surfistas, grandes olas, aficionados emocionados y trofeos en alto, todos transmitidos en vivo a los espectadores de todo el mundo, los aspectos más destacados reproducidos exponencialmente por los medios, tanto tradicionales como sociales.

"Esa amplificación se filtrará hacia el crecimiento del deporte, el crecimiento del WSL, el crecimiento de la industria", dijo Logan. "Por eso es algo bueno".

Quizás quiera explicarle todo eso a Medina.

Fuente: New York Times

Catorce jóvenes, siete chicos y siete chicas, serán los protagonistas de este reality show conducido por el mismísimo Kelly Slater.

 

Si quieres conseguir tu sueño como sea, y la primera opción no ha funcionado, quizá tengas que tomar otro menos ortodoxo. Esa es la razón por la que la gran mayoría de surfistas del programa, algunos muy conocidos en el panorama internacional, se han apuntado a "The Ultimate Surfer" de ABC, un programa que se desarrolla en el Surf Ranch de Lemoore (California), y cuyo premio es tan desproporcionado como jugoso. Los vencedores, un hombre y una mujer, dejarán el Surf Ranch con tres invitaciones en el CT y 100.000 dólares para ayudar a financiar el sueño.

Los participantes son todos estadounidenses con edades comprendidas entre los 23 y los 35 años, entre ellos nombres tan conocidos como Anastasia Ashley, Tia Blanco, Ezekiel Lau, Luke Davis, y Koa Smith.

Deberán enfrentarse a retos individuales y por parejas que les ponga la organización y cada semana dos chicos y dos chicas quedarán eliminados del concurso, hasta que solo queden los ganadores.

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Por si esto fuera poco, Kelly Slater será el padrino del programa, también será un consultor del programa, además de consejero de los jóvenes surfistas. Además contará con Jesse Palmer (de la NFL), Erin Coscarelli y Joe Turpel como presentadores.

Sin haber visto todavía el primer capítulo que se estrena hoy, me surgen varias dudas. La primera es si es justo que haya surfistas que se pasen luchando por entrar en el CT compitiendo en QS de mala muerte, viajando de un lado a otro sin un duro, y haya otros que simplemente porque son norteamericanos y guapos puedan tomar un atajo.

Otra de las dudas que surgen es si finalmente será un concurso de surf, en el que el deporte en sí, la competición, sea el eje central del programa, o se centren en los rollitos entre los participantes, la convivencia, y otros temas que nos recuerdan más a un Gran Hermano que a otra cosa. 

¿Si la prueba del CT en el Rancho de Olas de Slater fue lo más aburrido en mucho tiempo, qué interés tendrá ver a surfear esta ola a gente de un nivel muy inferior?

¿Será un bodrío, será un programa interesante? Solo tendremos que esperar unas horas para verlo. 

 
Det todas, las declaraciones de la CEO del WSL nos da una idea de por dónde va: “La crítica no significa una mierda. Todo el mundo va a tener sus opiniones sobre esto, no las estamos buscando. Esto es para el público en general. Quiero que el mainstream se meta en esto y se preocupe por el surf. Lo que piensen los surfistas incondicionales no importa"

 

Categoría femenina

- Brianna Cope: 26 años, Koloa (Hawái)

- Kayla Durden: 28 años, Jacksonville Beach (Florida)

- Bruna Zaun: 31 años, Redondo Beach (California)

- Juli Hernandez: 23 años, Costa Mesa (California)

- Malia Ward: 23 años, San Clemente (California)

- Anastasia Ashley: 34 años, Miami Beach (Florida)

- Tia Blanco: 24 años, Oceanside (California)

Categoría masculina

- Kai Barger: 31 años, Haiku (Hawái)

- Austin Clouse: 27 años, Jacksonville Beach (Florida)

- Mason Barnes: 27 años, Venice (California)

- Ezekiel Lau: 27 años, Honolulu (Hawái)

- Luke Davis: 28 años, Los Ángeles (California)

- Alejandro Moreda: 35 años, San Juan (Puerto Rico)

- Koa Smith: 26 años, Sunset Beach (Hawái)

La World Surf League anunció ayer que la directora ejecutiva, Sophie Goldschmidt, dejará su puesto y que el presidente de contenido, medios y estudios de WSL, Erik Logan, será su sustituto.